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Conoce las claves para conocer y degustar un whisky escocés a tu altura.

Whisky: cartografía del single malt

El single malt se ha convertido en la bebida esencial del hombre poderoso. Aquí te ofrecemos las claves para conocer y degustar, este majestuoso elixir.

Para que un destilado pueda ser llamado whisky escocés debe ser hecho en Escocia y añejado por un mínimo de tres años en barricas de roble. El resultado de ese proceso puede ser una mezcla de varias destilerías (blended whisky), o producto de la malta de una sola destilería, el afamado single malt.

En Escocia existen seis regiones productoras de whisky: Speyside, Highlands, Islands, Lowlands, Islay y Campbeltown, cada una con una historia y misterios muy propios.

Regiones productoras

01. Speyside

Es la región con mayor densidad de destilerías en el mundo, desplegada en un fértil valle surcado por ríos. Sus whiskies se caracterizan por su suavidad, lo que no implica que no sean complejos. Entre las etiquetas clásicas tenemos los herbales Glenlivet, los suaves Macallan y los frutales Glenfiddich; también destacan The Balvenie, Aberlour y Glen Moray.

Sugerimos: The Macallan Rare Cask

Este whisky apareció por primera vez en 2004 con una producción de tan solo 50 barriles. Estamos hablando de una malta excepcional: compleja, rica y atrevida. Madurado en barricas de jerez español de primer uso seleccionadas a mano, forma parte de la refinadísima colección 1824 Master Series y representa la mejor expresión de esta casa.

Notas de cata

  • Color: Caoba claro
  • Nariz: Naranja, chocolate y especias
  • Sabor: Pasas y roble, vainilla, chocolate y nueces
  • Final: Cálido y amplio como un buen coñac

02. Highlands

Cuna del single malt, entre los impenetrables páramos y las dramáticas costas de las tierras altas encontramos una alta gama de sabores. Si bien hay destilerías más al norte como Glenmorangie que producen maltas muy robustas; al sur, los frutos secos están muy presentes en Tullibardine; al este encontramos grandes ahumados como Ardmore, mientras que al Oeste, Oban nos entrega maltas donde la turba y las especies crean whiskies altamente complejos y con presencia.

Sugerimos: Dalmore King Alexander III

Cuenta la leyenda que en 1263 el jefe del clan Mackenzie salvó de morir al rey Alexander III a consecuencia del ataque de un enorme ciervo. Para honrar ese hecho, la corporación The Dalmore produjo en la actualidad este whisky, añejado en barricas de cabernet sauvignon francés, jerez español, marsala siciliano, oporto del Douro y bourbon de Kentucky. El resultado es un single malt pulido y balanceado como pocos. Un regalo de reyes.

Notas de cata

  • Color: Dorado cobrizo
  • Nariz: Malta, vainilla y frutos rojos
  • Sabor: Especies, caramelo y cítricos
  • Final: Cremoso y vibrante

03. Lowlands

Las tierras bajas son famosas por sus whiskies suaves y gentiles en los que encontramos reminiscencias de jengibre, caramelo, canela y ocasionales toques cítricos. De carácter floral, son muy apreciados como aperitivo gracias al delicado balance de sus maltas. Entre los más buscados están Glenkinchie, Linlithgow, Girvan y Strathclyde.

Sugerimos: Auchentoshan Blood Oak

Ubicada cerca de la industriosa ciudad de Glasgow, los whiskies de esta destilería se caracterizan por la suave fermentación de sus maltas y el proceso de triple destilación, típico del whiskey irlandés. En el caso del Blood Oak, la malta es madurada en barricas de vino tinto y bourbon americano, lo que le otorgan ese color intenso y una dulzura especiada muy característica.

Te recomendamos: Escocia: cinco días de caravana

Notas de cata

  • Color: Rojo rubí
  • Nariz: Vino tinto, azúcar, cítricos
  • Sabor: Naranja con notas de pimienta y un toque de miel
  • Final: Especiado, seco y corto

04. Islay

La isla de Islay alberga ocho destilerías llenas de misterio donde se producen los whiskies más ahumados. Laphroaig, Lagavulin, Caol Ila y Bunnahabhain elaboran auténticas bestias de sabor medicinal y turboso que generan férreos adeptos o claros detractores.

Recomendamos: Laphroaig 10 años

Para muchos expertos, este es el whisky más representativo de la región, y sin duda uno de los más conocidos single malt del mundo. Creado hace 75 años y reproducido desde entonces bajo la misma fórmula, dicen por ahí que es el preferido del príncipe Carlos. Ideal para rematar una comida robusta. Aunque no cualquier paladar lo tolera, ningún aficionado que se respete puede dejar de probarlo.

Notas de cata

  • Color: Dorado intenso
  • Nariz: Humo, regaliz, yodo, salado y dulce
  • Sabor: Alga, vainilla, especies, cardamomo, pimienta negra, limón y pera
  • Final: Amplio y muy seco

05. Islands

Una región versátil donde los whiskies pueden ser en extremo cítricos o bastante ahumados gracias al enclave marítimo de la zona y al carácter volcánico de sus pobladores. Aunque buena parte de estos single malt se distinguen por su salinidad, algunos son suaves y herbales.

Recomendamos: Talisker Dark Storm

Ubicada en la isla de Sky, la destilería Talisker representa lo mejor de la zona. La edición Dark Storm, disponible solo en los mejores Duty Free del mundo, es un whisky semi-ahumado añejado en barricas quemadas que le otorgan potencia y delicadeza a partes iguales.

Notas de cata

  • Color: Caoba suave
  • Nariz: Roble, seguido de cítricos y miel
  • Sabor: Tocino ahumado, pimienta molida y un toque de miel
  • Final: Muy largo, con evocaciones a nueces tostadas

06. Campbeltown

La península de Campbeltown es hogar de tan solo tres destilerías que producen whiskies muy distintivos y perdurables. Springbank elabora tres etiquetas completamente distintas entre sí, mientras que Glengyle produce el afrutado Kilkerran y Glen Scotia es buscado por sus acentos herbales.

Recomendamos: Springbank 15 años

Actualmente, Springbank es la destilería independiente más antigua de Escocia, lo que significa que su whisky es prácticamente hecho a mano, y eso le da un nivel de pureza indiscutible. El 15 años es madurado enteramente en barricas de jerez y es excelente para antes, durante y después de la comida. También es un gran acompañante de un buen puro.

Notas de cata

  • Color: Dorado
  • Nariz: Jerez, malta, roble, vainilla y cuero
  • Sabor: Ciruelas, mazapán y mantequilla
  • Final: Largo y ajerezado

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